2/3/07

Para que luego digan

Para que luego digan que la Voz de Dios, es decir, la Mía, no vale un pimiento: Rabo ha demostrado una gran inteligencia al plegarse al Terror Divino que emanaba mi ultimatum. Claro que lo ha hecho a su manera, intentando provocarme una vez más. Todavía no ha aprendido que no ofende quien quiere, sino quien puede. Y Rabo, no puede. Faltaría más. Para algo soy Dios. Me río del triángulo que me ha puesto, y de ese catalejos que no necesito para ver aquello que enfoco. Además, en su humana limitación, está convencido de que Dios, es decir Yo, soy vasco. Lo digo porque de otra forma, su último chiste, no puede ser del todo compredido. Que piense lo que quiera, lo mismo da. Pero más le vale no volver a provocar una situación como la que ha promovido. Chupameelrabo.blogspot.com existe para que él pinte sus monadas y Yo las vea. Eso es todo. Más le vale cumplir con su cometido y que Yo no vuelva a ser molestado por semejante tontería. Vivo muy ocupado. Espero que quienes seguís este blog, y a la vista de cómo se ha resuelto la crisis, digaís, al menos por una vez, " Gracias a Dios"·
De nada, mes ami(e)s.

2 comentarios:

javitrino dijo...

¿y lo divertido que es encarnar personajes de ficción? ¿se podría llamar a esto travestismo místico?

Anónimo dijo...

Oye Dios, ¿qué imagen has puesto que no se entiende ni hostias? ¿Es una cerilla en vertical medio consumida como mi vida? A ver si eres más clarito que tu hijo se explicaba muy bien con lo de las parábolas.
A mamar.